Dr. Gilberto Sosa
Médico General
“La prevención es una parte muy importante para solucionar el problema del cáncer.”
-Eva Vertes.
Nadie quiere que a algún familiar cercano, un buen amigo, vecino, conocido o en general a cualquier persona en el mundo, se le diagnostique cáncer. Además, es probable que se nos haga muy difícil abordar un tema como ese en alguna conversación casual, y peor si se trata de que los afectados son los más pequeños. Sin embargo, el cáncer es algo de lo que tenemos que hablar, es un tema que tenemos que abordar. No hablar de cáncer, y más aún, de cáncer infantil, es un paradigma que debería no existir. Depende de nosotros que continúe o no.
En Honduras, a diario se diagnostica un promedio de 17 personas con cáncer, de los cuales al menos 1 es un niño o niña. Lo que nos lleva a deducir que, al año, hay al menos 365 casos nuevos de cáncer infantil en todo el territorio nacional, cifra que, lastimosamente, se suma junto a todos los nuevos casos en el mundo entero, que dan un total de aproximadamente 300.000 al año, es decir 822 niños diagnosticados al día. En los países tercermundistas como el nuestro, desafortunadamente, sólo el 20% logra curarse, a diferencia de la tasa del 80% que se alcanza en los países desarrollados. ¡Es hora de actuar!
Eva Vertes, autora de la frase que tomé como inspiración para escribir sobre este tema, es una joven médico canadiense que, desde muy temprana edad, se ha dedicado por varios años a la investigación sobre la prevención, diagnóstico y tratamiento de muchos de los tipos de cáncer, incluyendo los que afectan a los pacientes en edad pediátrica. Y como Eva, hay muchos científicos que, impulsados con su afán de investigación y hambre de conocimiento, pero sobre todo con ganas de hacer algo que deje huella en la historia de la humanidad, aportan infinidad de cosas buenas para combatir esta enfermedad. Sería un desperdicio no tomar en consideración, para beneficio de los que nos rodean y de nosotros mismos, el trabajo de estos grandes líderes de la medicina.
Por eso, ser conscientes sobre la importancia del cáncer infantil y saber identificar algunos sencillos síntomas de temprana aparición, puede aportar de gran manera la detección precisa de este tipo de enfermedades; ayudando así a iniciar el tratamiento lo más pronto posible, logrando la evolución más favorable para el paciente.
Entre esos síntomas encontramos: sangrado frecuente, sudoración nocturna o excesiva, fatiga, cansancio o apatía sin causa aparente, dolor de cabeza, en los huesos o articulaciones, entre otros. Es importante aclarar que el hecho de presentar uno de estos síntomas no es sinónimo de un diagnóstico de cáncer; pero las dudas sólo se esclarecen en el consultorio del médico de cabecera con la ayuda de una buena interrogación, acompañada de un examen físico minucioso, complementándolos con pruebas de laboratorio.
Contra el cáncer sólo hay dos opciones: ser víctima o superviviente. Ayudemos a estos campeones y campeonas a tener una buena calidad de vida, desde el aparecimiento del primero de los más sencillos síntomas, hasta la fase de tratamiento, el que todos esperamos sea un éxito.
En Honduras, febrero es el mes de concientización y lucha contra el cáncer infantil, específicamente el día 15. Las oportunidades para colaborar con estos pequeños y sus familias se ponen a la orden del día. Es mejor robarles una sonrisa que las ganas de ganar.
Actuemos juntos. Contra el cáncer infantil, ¡sí podemos!